Nuestro Patrono
San Francisco de Asís
Patrono de la Institución
Nos enseña a vivir la virtud de la humildad. San Francisco tenía un corazón alegre y humilde. Supo dejar no sólo el dinero de su padre, sino que también supo aceptar la voluntad de Dios en su vida. Fue capaz de ver la grandeza de Dios en la naturaleza y la pequeñez del hombre.


Oración de la paz
Señor, hazme Instrumento de Tu paz;
que donde haya odio, siembre yo amor;
donde haya injuria, perdón;
donde haya duda, fe;
donde haya desesperación, esperanza;
donde haya oscuridad, luz;
donde haya tristeza, alegría.
Oh Divino Maestro:
Concédeme que no busque ser consolado, sino consolar,
que no busque ser comprendido, sino comprender,
que no busque ser amado, sino amar;
porque dando, recibo;
perdonando, es como Tú me perdonas;
y muriendo en Ti, nazco para la vida eterna.
¡Amén!